Unas imágenes (fotos de Natascha De Cortillas y Julia Tamagnini) y un texto de Leila Tschopp sobre residencias de artistas, para recordarla.
La convivencia con otros artistas en residencia puede funcionar, para cada uno, como un espejo. El reflejo de un entorno diferente, de artistas de procedencia diversa (aun cuando fueran de un mismo país) nos permite revaluar el campo y los circuitos habituales y la propia situación con relación a éstos. Confrontar con otros modelos (en sus diferencias y similitudes) es una tarea necesaria para el artista y su trabajo continuo de pensar cuál es su lugar. (...)
Si la experiencia de la residencia atravesó nuestra estadía, notaremos la diferencia. La mirada está ligera, pero ostensiblemente corrida; los temas a pensar se han diversificado; las fuerzas se han incrementado. Creemos poder ir más allá.
Leila Tschopp en Un Pequeño Deseo nº 10, año 2009.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario