De un lado y del otro del vidrio, el estudio de la UTN se convirtió por espacio de 2 horas en el living de la trece.
la música fue, una vez más nuestro nexo. acercarnos a nuestros invitados: Amaranta y Martín de 16 años, fue una experiencia diferente con mucha música en común.
la intención de nuestro programa fue tratar de entendernos más allá de las diferencias, la más obvia, la de no haber vivido en aquellos años nos dejó ver una generación sin temores a decir lo que piensan y sin necesidad de defender sus gustos y sus actitudes. frente a un micrófono contándonos sus vidas (impensable en aquellos años) Casi 30 años tuvieron que pasar para que germinen algunas semillas, por que luego del golpe feroz todavía seguimos "procesando" aquel duelo y ninguno ha salido invicto de él.
casatrececordoba
martes, 22 de marzo de 2005
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